Luz verde para un futuro respetuoso con el medio ambiente.A finales de 2019, los Estados miembros de la Unión Europea decidieron reducir el consumo de energía en un 55 % para 2030 en comparación con 1990. Para alcanzar este objetivo, dos nuevos reglamentos de la UE regulan el diseño ecológico (SLR) y el etiquetado energético (ELR) de las fuentes de luz.

Los nuevos requisitos legales conducen a un endurecimiento de los límites de las clases energéticas y, en última instancia, a una nueva clasificación de los aparatos en las clases de eficiencia energética de la A a la G. Debido a la nueva escala y a los requisitos de ahorro asociados a ella, casi todos los productos experimentan un cambio negativo en su clase de eficiencia energética.

Importante:
La eficiencia energética del producto no empeora, simplemente se representa en una nueva escala. Un producto que antes estaba clasificado, por ejemplo, en la clase de eficiencia energética A++, ahora está en la clase E. La nueva escala garantiza una mejor comparabilidad.

Hasta ahora, las regulaciones se referían a lámparas, módulos LED y luminarias. Con la nueva normativa se han redefinido los ámbitos de aplicación. Las regulaciones se refieren ahora exclusivamente a fuentes de luz y equipos de control independientes. Las fuentes de luz incluyen lámparas, módulos LED y luminarias en las que la fuente de luz no se puede extraer sin destruirla. Las luminarias en las que sí se puede extraer la fuente de luz se consideran, en cambio, "productos circundantes". Estos no necesitan etiqueta energética.

¿Por qué no todos los productos tienen una etiqueta energética?
En STEINEL, los focos se definen como fuente de luz. Por eso, todos los focos reciben la nueva etiqueta energética e información adicional a la norma de la UE. Según el nuevo reglamento, STEINEL define las lámparas como productos envolventes y, por lo tanto, no tienen etiqueta energética. STEINEL informa con total transparencia y mucho más allá de los requisitos legales.